La conexión entre la geometría sagrada y la espiritualidad radica en la creencia de que estas formas geométricas representan principios universales y divinos. Muchas personas buscan experimentar una profunda conexión con lo divino y encontrar respuestas a preguntas existenciales.
La geometría sagrada se utiliza en la meditación y la visualización como una herramienta para enfocar la mente y elevar la conciencia. Cuando te concentras en patrones geométricos, se experimenta un estado de tranquilidad y conexión espiritual. Por ejemplo, los mandalas ayudan a equilibrar la mente y el espíritu.
A además, a lo largo de la historia, la arquitectura ha utilizado la geometría sagrada en la construcción de templos, iglesias y monumentos. Estas estructuras están diseñadas para reflejar los principios de orden y armonía divina, creando un espacio sagrado que inspira reverencia y conexión espiritual. Por ejemplo, la Gran pirámide de Giza contiene proporciones geométricas relacionadas con conceptos astronómicos y espirituales.
Los mandalas suelen tener patrones geométricos simétricos y son utilizados como una forma de enfocar la mente y conectar con el ser interior.
Trabajar con mandalas se considera una práctica terapéutica y espiritual. Pintar o contemplar un mandala ayuda a calmar la mente, equilibrar las energías y promover la curación.
Los mandalas representan la totalidad y el orden cósmico, y ayudan a integrar y armonizar diferentes aspectos de la experiencia humana.
Este símbolo tiene sus raíces en la antigua Grecia y ha sido utilizado por filósofos y místicos como Pitágoras (a quien se le atribuye su creación) para representar principios matemáticos y espirituales.
Es la relación entre lo finito y lo infinito, así como la unidad y la interconexión de todas las cosas.
También es un símbolo místico que representa el número diez al que los pitagóricos llamaban el tetrakto divino, porque era la suma de los primeros cuatro enteros.
Es decir: el 1 es el punto, el 2 la línea, el 3 la superficie y el 4 el sólido; el número 10, es la suma de ellos.
En la tetraktys el número uno representa la unidad y el origen de las cosas, lo divino.
El número dos representa la dualidad, el origen de lo masculino y lo femenino.
El número tres, los tres niveles del mundo: celeste, terrestre, infernal, y todas las trinidades.
El número cuatro representa los cuatro elementos, tierra, aire, fuego y agua, y con ellos la multiplicidad del universo material.
De hecho, la representación triangular del 10, para los pitagóricos, se interpretaba como un símbolo sagrado sobre el que se juramentaba en las ceremonias de iniciación.
Esta figura se utiliza en diversas tradiciones espirituales como un símbolo de equilibrio, protección y ascensión espiritual.
Representa la unión de los opuestos, la integración de las polaridades y la armonía entre el cielo y la tierra.
También se utiliza en meditaciones y prácticas espirituales para expandir la conciencia y activar la energía divina dentro del ser humano.
El símbolo 3D entero gira en el sentido de las agujas del reloj. Esta estructura crea una especie de estrella de seis puntas o estrella de David en tres dimensiones.
Merkabá o Merkavah es el nombre general para referirse a un carro, pero cuyo término ha derivado para referirse al carro celestial que aparece en la Biblia, en el Libro de Ezequiel 1:4-26.
El término presenta una raíz consonántica r-k-b, que tiene el significado general de dirigir.
Se considera un vehículo de luz y conciencia que puede llevar al individuo hacia la iluminación espiritual y la conexión con planos superiores de existencia. Esta forma geométrica sagrada posee un campo energético que permite acceder a niveles superiores de consciencia y activar la energía divina dentro del ser humano.
Cubo de Metatrón o Estrella de Metatrón. El Cubo de Metatrón se forma conectando líneas que se cruzan a través de los 13 círculos de los que está compuesto. Las 13 esferas del Cubo de Metatrón representan simbólicamente 13 planos de existencia, reinos, dimensiones o niveles de frecuencia del universo. Y estos trece niveles están presentes en todas partes todo el tiempo.
El cubo de Metatrón contiene en sí mismo todas las formas geométricas y patrones que existen: contiene las formas sagradas del Flor de la vida, la Semilla de la vida y la Merkaba. También contiene todos los sólidos platónicos, los cuales se cree que son la base de cada diseño que existe en el universo.
El Cubo de Metatrón se considera un símbolo poderoso de protección, equilibrio y conexión con lo divino. Además de su papel como mensajero divino y guardián de los secretos, Metatrón también se asocia con la sanación y el equilibrio energético ya que ayuda a armonizar y purificar los cuerpos físico, emocional y espiritual. Muchas personas recurren a la figura de Metatrón en meditaciones y prácticas de sanación para buscar su guía y apoyo espiritual.
Como conclusión, la geometría sagrada es una disciplina que explora las formas y proporciones geométricas con un significado simbólico y espiritual profundo, y se utiliza para promover la armonía, la conexión espiritual y la comprensión de los principios universales.
Deseo haberte despertado la curiosidad para que continúes explorando la conexión con la divinidad de la que todos formamos parte. Somos uno con el universo y el universo se representa en todo lo creado. Esas formas geométricas también están en nosotros, en nuestras células, nuestros órganos, en la naturaleza, en todo el universo. Abarca desde la forma de vida más simple a la más compleja. Es el milagro de la vida.